Mezclar la harina, la sal, el azúcar y la levadura en un bol. Añadir el agua y el aceite, mezclar bien con una cuchara de madera, sin amasar.
Cubrir la masa y dejarla fermentar a temperatura ambiente durante 24 horas aproximadamente.
Colocar la olla de hierro fundido con la tapa en la mitad inferior del horno, precalentar el horno a 240 grados centígrados. Sacar la fuente, colocar la masa sobre una hoja de papel de horno, ponerla en la fuente, espolvorear un poco de harina y poner la tapa.
Hornear durante unos 25 minutos en la mitad inferior del horno, luego quitar la tapa y hornear durante 15 minutos más. Retirar el molde del horno, sacar el pan del molde y dejar enfriar sobre una rejilla.